Este movimiento comenzó haciéndose en Radio, aproximadamente, en 1960, ya que las frecuencias eran mas fáciles de piratear, de ahí fue expandiéndose en todos los medios de comunicación de hoy día hasta la actualidad con los nuevos medios, incluyendo el Internet.
El atasco de la cultura (Culture Jamming) es una táctica en la cual un activista intenta interrumpir o derribar las instituciones culturales de corriente o la publicidad corporativa.
El atasco de la cultura se emplea generalmente en la oposición a una apropiación percibida del espacio público, o como reacción contra conformidad social. Los ejemplos prominentes del atasco de la cultura incluyen la adulteración de la cartelera que hace publicidad por el “BLF” y los partidos y las protestas de las calles, organizados por “Reclaim the Streets”. La cultura Jamming exige, a veces, la transformación de medios de comunicación para producir comentarios irónicos o satíricos sobre sí mismo, usando el método del medio original de la comunicación.
El Culture Jamming suele confundirse con la apropiación artística, que se hace para motivar artistas, y vandalismo, en el cual la destrucción o la desfiguración es la meta fundamental. Aunque, el resultado final, no sea siempre distinguible de estas actividades, el intento detrás del Jamming es muy diferente de los artistas y de vándalos, pero esta incluido dentro de la categoría de “Street Art”.
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